A tres años de ‘Marauder’, su último material discográfico, Interpol se está preparando para premiar a su base de fanáticos con un nuevo álbum, el séptimo de su carrera; que deberá de llegar en algún punto del 2022. Sin embargo, contrario a lo que los fans están acostumbrados a escuchar, el próximo trabajo del conjunto neoyorquino tendrá un ánimo alegre y positivo, según ha sugerido la propia banda.

En entrevista con Rolling Stone, Paul Banks y Daniel Kessler compartieron algunos detalles sobre su próximo disco -aún sin título- y cómo la pandemia le dio un giro de 180º a la mentalidad del grupo, así como su dinámica de composición.

“Este disco es vibey. Es la esencia de la banda, el corazón y el alma, nuestras canciones tienen un tipo de ADN específico y este disco lo toma y lo convierte en algo completamente diferente”, dijo el vocalista Paul Banks.

Por su parte, el guitarrista Daniel Kessler agregó: “Nosotros somos una banda de la vieja escuela que estaba acostumbrada a reunirse y ensayar hasta que las canciones tuvieran sentido y pudieran valerse solas. Creo que por eso fue tan retador adaptarse y usar esta tecnología”.

Vía Rolling Stone.

Y es que tras el primer bloqueo global por la emergencia sanitaria, los tres integrantes de Interpol quedaron varados en distintas ciudades. Paul en Edimburgo, Daniel en España y Sam Fogarino en Georgia. Fue así que, para crear música nueva durante el periodo de aislamiento; tuvieron que valerse de nuevas técnicas y hacer de la contemplación su aliada, como en el caso de Banks.

El vocalista cuenta a Rolling Stone que se ordenó una nueva guitarra (color crema, no obscura, como acostumbra), y comenzó a crear versos sueltos a partir de la construcción de acordes que le mandaba Daniel Kessler por correo.

“Terminé quedándome en Edimburgo por el resto del primer año de la pandemia. Fue un escenario como de la Isla de Gilligan. Fue agradable y romántico. Me sentí afortunado”.

“(…) Esto fue un experimento surrealista. Reaccioné a una obra arquitectónica que Daniel pensó y sintió y a partir de eso estuve escribiendo versos libres. Como cantante eso fue exhilarante porque tenía un potencial infinito”.

Vía Rolling Stone.

Tras la relajación de restricciones, Interpol finalmente logró reunirse para pulir los detalles de su próximo álbum que, a diferencia de aquellos que los lanzaron al estrellato a principios del dos mil; prescindirá de ese humor oscuro y taciturno palpable en sencillos como “Narc” u “Obstacle 1”. La nueva tanta de temas es producida por Flood y Alan Moulder, cuyas referencias laborales incluyen a Depeche Mode, PJ Harvey, Smashing Pumpkins y U2.

Dos décadas después de Turn On the Bright Lights, tanto Banks como Kessler se sienten afortunados de que Interpol siga haciendo música. “Saber que seguimos haciendo esto los tres, se siente bien. Es algo que necesitábamos hacer, así ha sido desde el primer día y veinte años después nos sentimos igual”– afirmó Banks.