The Truman Show, la icónica película dirigida por Peter Weir y escrita por Andrew Niccol en 1998, ha sido hasta el momento uno de los experimentos cinematográficos más interesantes en cuestión de narrativa que Hollywood haya visto hasta el momento.

Es por eso que ahora, a sus 25 años de haberse estrenado, el largometraje que nos presentó la vida Truman Burbank, un ser humano que desde niño creció dentro de un set de televisión para ser observado día y noche como parte de un programa de televisión, vuelve a los titulares ahora que NME se encargó de buscar a Andrew Niccol, creador de toda la historia y guión, para platicar del efecto que esta cinta tuvo en la sociedad actual.

¿Lo primero? La creación de los reality shows, mismos que si bien parecían una locura controladora y enfermiza en la película, se convirtieron en una realidad tan abrumadora que incluso hoy en día, tenemos la llamada “Casa de los Famosos” en México donde nos dedicamos precisamente a eso: ver gente viviendo su día a día.

¿Lo segundo? Hoy por hoy, las redes sociales son precisamente eso, un Truman Show voluntario en donde como usuarios nos encargamos de decir “Buenos días, buenas tardes y buenas noches” a un mundo de espectadores que ya ni siquiera tienen que seguirnos, pues para ellos somos contenido que aparece de repente y que pueden decidir si consumen o no.

Sin embargo, lo que realmente resulta interesante de la entrevista es que, luego del éxito de la película, Andrew quería ofrecer un guión para un spinoff en la pantalla chica.

“Mi idea era hablar de la historia de otros 4 realities similares: un chico en Brooklyn, una chica en Manhattan, y otros dos más en barrios diferentes.

Ellos, como Truman, crecen y viven dentro de un set, pero eventualmente los juntábamos para que interactuaran entre los dos y notaran que entre ellos, las cosas eran distintas porque no estaban actuando.

¡Incluso hasta tenía planeada una segunda temporada en la que luego de enamorarse, la televisora los separaba! Pero justo caíamos en ese dilema: ¿el amor lo puede todo? Creo que era una buena idea pero nunca sucedió”.

Hoy en día, una continuación de esta película con un Jim Carrey más maduro y sabio, podría ser el golpe de realidad que necesitamos. Pero de momento, no hay planes al respecto.