El objetivo primordial de todo artista radica en plasmar sentimientos en su obra final. La conexión más poderosa entre músicos y audiencia se alcanza al crear algo que conmueva a quien lo escucha. A pesar de los clásicos de Pink Floyd, Roger Waters sintió que una pieza fundamental de su discografía nunca fue del todo comprendida.

Desde el inicio, Roger Waters fue indulgente con la dirección de la banda. Tras la salida de Syd Barrett, transformó el sonido del space rock hacia el rock progresivo, expandiendo los límites del género.

Con David Gilmour, Waters exploró la identidad sonora de la banda. Aunque obras como ‘Atom Heart Mother’ marcaron hitos, fue con “Echoes” en ‘Meddle’ (1971) cuando consideraron haber alcanzado su plenitud.

Mandatory Credit: Photo by Ray Stevenson/Shutterstock (151596al) Pink Floyd – Roger Waters, Nick Mason, David Gilmour, Rick Wright – c 1970 Various – Nov 1988

‘Dark Side of the Moon’ (1973) marcó una innovación sonora mientras Waters se consolidaba como compositor. Evitó convenciones, optando por diseccionar su estado mental en álbumes como ‘Wish You Were Here’.

‘The Wall’ nació de su dolor personal, narrando la historia de una estrella que construye barreras emocionales y físicas. Aunque la banda colaboró, fue la visión individual de Waters, incluso despidiendo a Richard Wright por desavenencias creativas.

A pesar de ‘The Final Cut’, Waters decidió dejar Pink Floyd, mientras Gilmour tomaba el timón. Aunque interpretaron temas de The Wall’, Waters cuestionó la comprensión de sus compañeros sobre la obra.

Al hablar de la interpretación de Pink Floyd en “Comfortably Numb”, Waters expresó su descontento: “No entienden la esencia. Pero el público piensa que es Pink Floyd. El apego a la marca es algo que debo soportar” (vía Far Out).

Waters llevó su visión de ‘The Wall’ en giras en solitario, ofreciendo el álbum íntegro con efectos grandiosos. Aunque se considera una gran obra de Pink Floyd, Waters sigue viendo su potencial desaprovechado debido a discrepancias.

La travesía en solitario de Waters trasladó ‘The Wall’ a escenarios globales con extravagantes presentaciones. Aunque reverenciado, él siente que su verdadero alcance no fue comprendido por todos.