Se dice que los millennials destinan una buena parte de su dinero a asistir a conciertos. Y aunque esto podría parecer una simple actividad de esparcimiento, un estudio ha revelado que, de hecho, ir a un concierto cada dos semanas podría añadir hasta 9 años a la expectativa de vida de una persona.
La investigación fue realizada por el profesor asociado de la Universidad Goldsmith, Patrick Fagan, especializado en ciencias del comportamiento; en colaboración con la mítica sala de conciertos británica The O2.
Según el estudio, vivir un concierto durante sólo 20 minutos puede suponer un aumento del 21% en la sensación de bienestar. Además, la investigación encontró un vínculo directo entre “altos niveles de bienestar y un aumento de la esperanza de vida de nueve años” o más.
Por supuesto, si tienes 100 años, ir a conciertos todas las noches no te extenderá hasta los 109. Pero sí significa que los fans más jóvenes pueden aumentar efectivamente su esperanza de vida al permitirse un comportamiento positivo. Es decir, siempre que se abstengan de drogas gravemente nocivas, de actividades de alto riesgo y tengan hábitos saludables en general.
La estimación de la extensión de la vida no fue una suposición aleatoria. A los participantes del estudio se les realizaron pruebas psicométricas y pruebas de frecuencia cardíaca. Los resultados mostraron que los participantes aumentaron sus sentimientos de autoestima (25%), cercanía con los demás (25%) y estimulación mental (75%) cuando van a conciertos.
La mayoría de nosotros sabemos que la música es beneficiosa para la salud, pero este es el primer estudio que muestra que asistir a shows musicales en realidad puede agregar años a la vida. Dicho esto, un área que probablemente distorsiona estos datos es que las personas que asisten regularmente a espectáculos en vivo son probablemente personas más sociables, con una mayor inclinación a disfrutar de los placeres de la vida (lo que beneficia su salud de manera más amplia).
¿Y qué pasa con los placeres musicales solitarios? En este sentido, resulta que limitar tu amor por la música a la comodidad de tu hogar aún te hará bien. Pero asistir a un concierto es mucho mejor.
Por aquí puedes leer las conclusiones completas del estudio realizado por The O2. Y por acá, te compartimos los resultados de otro estudio que afirma que la Gen Z es la más propensa a mentir para ir al concierto de su artista favorito.
