Michael Lang, co-creador y organizador de la Feria de Música y Arte de Woodstock de 1969, y de sus continuaciones Woodstock ’94 y el malogrado Woodstock ’99; falleció el sábado (8 de enero) a la edad de 77 años en el Sanatorio Sloan Kettering de Nueva York. La causa de la muerte fue una rara forma de linfoma no Hodgkin, según el portavoz de la familia, Michael Pagnotta (vía CNN).

La última vez que Lang apareció públicamente fue justo antes de que se produjera la pandemia del Coronavirus en torno al 50º aniversario del festival, que estuvo marcado por los controvertidos intentos de organizar un festival Woodstock 50.

Aunque podría decirse que es más conocido por ayudar a organizar el histórico festival, su carrera incluyó la gestión de iconos de la música como Billy Joel y Joe Cocker, así como la producción de numerosos conciertos de rock.

Lang creció en Brooklyn, Nueva York y asistió a la universidad en esa misma ciudad antes de convertirse en promotor de conciertos en la década de 1960. El año anterior al emblemático festival de Woodstock, Lang organizó un evento llamado Miami Pop Festival, en el que participaron artistas como Jimi Hendrix y Frank Zappa.

Más tarde, Lang, junto con John Rosenman, Artie Kornfeld y John P. Roberts, conceptualizó el festival de Woodstock, en Woodstock, Nueva York.

Alrededor de 400 mil personas acudieron a la aldea de Bethel, a unos 80 kilómetros al noroeste de la ciudad de Nueva York, y soportaron atascos kilométricos, lluvias torrenciales, escasez de alimentos e instalaciones sanitarias saturadas. Más de 30 artistas actuaron en el escenario principal del festival de Woodstock, situado en la base de una colina en terrenos propiedad del agricultor Max Yasgur, y los asistentes pudieron disfrutar de actuaciones emblemáticas de artistas como Jimi Hendrix, Carlos Santana, The Who y Jefferson Airplane.

Lang y otros trataron de montar un concierto en 2019 conmemorando el 50 aniversario del Woodstock original, pero el esfuerzo finalmente fue desechado debido a problemas financieros y a la dificultad para asegurar un lugar. En una entrevista con AP en ese momento, Lang calificó la experiencia como “un viaje realmente extraño” y dijo que todavía esperaba celebrar el concierto en el futuro.