Este ha sido el robo más amable de la historia.

Una mujer le pidió a un amigo suyo que fuera por su coche marca Subaru, y cuando ella lo vio al día siguiente se dio cuenta que no era el suyo. Entonces ¿qué hace alguien cuando roba accidentalmente un coche? Regresarlo a donde estaba, con una nota de disculpas y 30 dólares para compensar la gasolina que se gastó, claro; eso haría cualquiera, ¿no?

Obviamente la dueña real del coche ya había hecho el reporte de robo, pero cuando se encontró la nota de disculpas los policías dijeron que las llaves podían funcionar en otros coches, y que había sido una equivocación real.

Qué bonito que todos viviéramos en un mundo así de amigable. Nos hemos convertido en fans de esta mujer. Aquí puedes ver la nota original:

Vía Mashable