Si no eres tan, pero tan fan de los Beatles, entonces debes conocer un dato interesante y al mismo intrigante. Los Beatles no son los dueños legales de la mayoría de sus canciones, principalmente las que fueron compuestas por John Lennon y Paul McCartney.

Esto pasó por una jugada de la industria musical, y su principal protagonista fue Michael Jackson, quien compró la compañía de publishing ATV Music en 1985, la cual era la propietaria de casi todo el catálogo de los Beatles. Décadas después, Michael Jackson falleció (atrás en 2009) y con todo el escándalo, sus propiedades fueron puestas en venta poco a poco.

Una de estas propiedades es, adivina, ATV Music, misma que fue vendida a Sony por $750 millones de dólares, y con este nuevo giro, el propio Paul McCartney ha puesto manos a la obra para poder recuperar legalmente sus obras. Lo importante de todo esto es que McCartney tiene muchas oportunidades de triunfar ya que el Acta de Derechos de Autor de los EE. UU. de 1976 establece que los autores originales de obras creadas antes de 1978 las pueden reclamar al pasar 56 años.

Ahora, gran parte del catálogo de los Beatles está en revisión y es muy posible que las canciones donde participó McCartney regresen a sus manos.

Vía NME.