Adam Koessler es el padre de una niña de dos años llamada Rumer Rose. Adam enfrenta cargos por el delito de “posesión de drogas peligrosas” y “dar drogas peligrosas a un menor de 16 años”, después de que le administró aceite de marihuana a su hija Rumer, para atenuar los dolores del cáncer en etapa avanzada que padece la pequeña. A decir de Adam, Rumer Rose mostró signos de recuperación con el tratamiento, que ya es común en muchas partes del mundo, pero no en Australia, donde ocurrieron los hechos.

También te puede interesar: “¿Te gusta la marihuana? ¿Te gusta el sexo? Este trabajo es perfecto para ti”

Además de esto, al enfrentar un proceso legal, la administración del hospital donde se encuentra su hija, le ha impedido las visitas. Esto, ha deteriorado aún más la salud de la pequeña Rumer. 50 mil personas han firmado una petición en change.org para solicitar la intervención del premier de Queensland, Campbell Newman, para que permita las visitas de Adam a su hija.

La pequeña Rumer sufre de una etapa avanzada de neuroblastoma, un cáncer que se forma en el tejido nervioso. La marihuana terapéutica ha demostrado mejorar la calidad de vida de los pacientes que batallan contra enfermedades cancerígenas. Sí deseas apoyar a Adam, puedes visitar su página de Facebook, así como la petición que buscar reunirlo a él con su hija, y cambiar la visión de la marihuana medicinal en Australia. Si fueras padre, ¿no intentarías todo?

Vía Mirror