Enamorarse de los chicos malos es de las cosas más comunes que pueden pasar. Son misteriosos, peligrosos y muy sexys y su actitud de rebeldía ante la vida nos puede derretir. ¿Recuerdas a James Dean? ¿O qué tal Colin Farrell? ¿Fan de Heath Ledger? Aquí te decimos por qué nos encantan los chicos malos.

Señales de que no quiere ser más que amigos

Estas son las cosas que no dejarán de encantarnos de los chicos malos:

1. Son seguros de sí mismos: con una mirada te derriten pues su seguridad es tal que no puedes evitar que te tiemblen las piernas cuando te ven directo a los ojos.

2. Son emocionantes: les encanta la aventura y hacer cosas “prohibidas” por lo cual siempre puedes esperar algo nuevo de él y nunca caerá en el lugar común.

3. Son misteriosos: no revelan mucho sobre su vida ni sobre sí mismos y por eso mismo nos intrigan aún más. ¿Por qué se comportará así? Seguro tiene un pasado oscuro y tortuoso súper increíble y desgarrador. Sí por favor.

4. Nos encantan los retos: la idea de convertir a los chicos malos en chicos buenos es una ilusión que todas chicas tienen pues creemos que somos las indicadas para hacerlo y que obvio ellos cambiarían por amor.

5. Son súper masculinos: chamarras de cuero, cigarros, pelo despeinado, actitud de no me importa y un andar súper masculino…

6. Son independientes: no le piden permiso a nadie para hacer lo que quieren y por lo mismo son súper independientes y saben qué quieren de la vida.

7. Son impredecibles: con él nunca sabes qué puede pasar. Un día te puede sorprender con algo increíble y al siguiente puede pretender que no le importas y eso sólo te hará desearlo más.

8. Siempre queremos lo que no podemos tener: es un hecho que el ser humano siempre quiere lo que no puede tener y, en el caso de los chicos malos, el que sea tan ausente y lejano te da aún más ganas de tenerlo cerca.

9. Son sexys: ¡muy pero muy sexys!