Hace algunos años atrás, recuerdo haberme enamorado de la idea de que el Chingadazo de Kung Fu, era una versión de mi banda de happy-punk favorita de la infancia, traída a un contexto más adulto, grisáceo y real.
A mis 25 años ya no quería escuchar de patinetas. Quería escuchar la realidad.
Y en muchos sentidos, el CHDKF me llenó de esa comprensión a través de su música gracias a la sinceridad de sus letras.
Cocaína, malas relaciones, peores sentimientos y la constante lucha por sobrevivir a la adultez, me llevaron a entender el porqué de mi amor a este proyecto al que, siempre con muchísimo sarcasmo, me refería como “la peor banda del mundo” meramente por lo divertido que me parecía sentir que en mi hoyo de mierda, había tres cabrones acompañándome en mi depresión y dolor a través de sus canciones.
Hoy el CHDKF no es el proyecto que conocí hace varios años atrás.
Alejandro, Beto y Marino, han atravesado por una catarsis personal que se refleja mucho en la música que hacen hoy en día.
Hoy, las canciones ya no sólo hablan de una relación rota, drogas y fiesta. Hoy, las letras del Chingadazo se conectan más al sentimiento adulto de las rupturas emocionales que emanan de conflictos familiares, distanciamientos y amistades, así como de dudas personales que cualquier persona que se enfrenta de cara a la adultez, suele tener a la mitad de la noche acompañadas de sudores fríos y ataques de ansiedad.
El CHDKF se ha ido de hocico y sin meter las manos. Y eso está bien.
Ese mismo dolor es el que hoy da vida a su nuevo video para “Epitafio (Perdón por ser rock and roll)”, un track que, como el mismo Marino describe, nace a partir de un conflicto familiar entre él y su madre, que eventualmente lo llevó a darse cuenta (gracias a una conversación con Erik de Allison), que prácticamente sus disculpas eran un discurso de arrepentimiento por ser él mismo…
Por ser rock and roll.
Gracias a la dirección de Alan Smithee y la fotografía de Diego Medina Riveroll, algunas de las muchas caras que conforman a esta familia llamada CHDKF, dieron vida a este nuevo audiovisual que hasta el momento, es probablemente la producción más elaborada que han realizado desde que comenzaron a tocar.
Está bien irse de hocico y perderlo todo. Solamente hay que saber mantenerse de pie y siempre regresar a volverlo a intentar…
