Massive Attack regresó a México después de cuatro años para uno de sus conciertos más accidentados, pero memorables. Con toda razón, tenían que cerrar uno de los escenarios del Corona Capital 2014 para ofrecer su impactante show. Massive Attack, como todo acto audiovisual, nos mantuvo hipnotizados los cortos 40 minutos que pudieron tocar, por culpa de la lluvia. Ni modo, nadie puede controlar el factor clima, algo que quedará para la posteridad, ya que jamás había caído una gota del cielo en este festival. Si ya se trataba de un concierto épico, aún faltaba lo más impresionante: un rayo que cayó detrás del escenario en medio del concierto. Después de esto, el festival anunció la suspensión de actividades, y mientras todos esperábamos saber qué iba a pasar, al menos nos quedamos con un buen sabor de boca. Abajo les dejamos un testigo en fotos de lo que pasó en el escenario Doritos.