Bien dicen por ahí que recordar es volver a vivir, y hoy celebramos una de las fechas más icónicas de la música, ya que este día, 2 de julio, pero de 2005, Roger Waters, David Gilmour, Richard Wright y Nick Mason subieron al escenario del festival Live 8 en punto de las 11:23 pm, en lo que sería el primer concierto de Pink Floyd con la alineación clásica en 24 años.
Aquel Sábado 2 de julio, el emblemático Hyde Park de Londres, Inglaterra, se abarrotó con decenas de miles de personas que fueron testigos de un desfile artístico de épicas proporciones, curado con la ayuda de la mítica figura inglesa Bob Geldof, quien también había organizado el festival Live Aid en 1985.
El cartel del día, al menos para la locación de Londres, incluyó actos como Paul McCartney, Elton John, The Killers, U2, Robbie Williams, Sting, The Who, Coldplay, Keane y bueno, básicamente la crema y nada del rock inglés, para ser más claros.
Pero días antes, comenzó a circular en Internet el rumor de que el festival Live 8 traía un as bajo la manga, una atracción que superaría a la imponente lista de actos confirmados que ya, de por sí, tenía a millones de personas con la emoción hasta el cielo. ¿De quién se trataba, pues?
No obstante, si bien lo recordarán los fans más aguerridos de Pink Floyd, pocas horas antes de iniciar el Live 8, Internet sabía en secreto que la sorpresa del día se trataría de una actuación especial de la banda, con la alineación clásica: Roger Waters, David Gilmour, Richard Wright y Nick Mason. ¡Imposible, tienen casi un cuarto de siglo sin hablarse!
Y al final, ocurrió. Las diferencias banales (principalmente entre Roger y David) quedaron a un lado por, al menos, 24 gloriosos minutos, para apoyar una causa mayor. Y lo pudimos presenciar, con nuestros propios ojos.
Y lo mejor de todo fue que, gracias a la magia del Internet (y aunque las nuevas generaciones no lo crean) el concierto fue transmitido por livestream a todo el mundo, y gracias a la tecnología de hace 15 años, millones de fans de Pink Floyd pudieron vivir en directo uno de los hitos más importantes de la historia de la música, sino es que el más grande del nuevo milenio, al día de hoy.
Este día celebramos el XV aniversario del último concierto que dio Pink Floyd en la historia, con la alineación clásica y que representó prácticamente un emotivo símbolo que cerraría, de una vez por todas, una de las eras más grandiosas de la música.