Más de una década después de que la superproducción de ciencia ficción ‘Avatar’ llegara a los cines, James Cameron regresa con una secuela que vuelve a llevar al público al exuberante mundo de “Pandora”. Pero algunos espectadores indígenas no están especialmente interesados en volver a él.

‘Avatar: El Camino del Agua’ y su director se enfrentan a un nuevo escrutinio por parte del público nativo, algunos de los cuales han criticado la franquicia por su narrativa del “salvador blanco”, el uso de estereotipos y la representación inadecuada de los pueblos indígenas.

Yuè Begay, artista y activista navajo, hizo un llamamiento al boicot de la película en un tuit que ha recibido más de 47.000 likes. Muchos otros también han expresado sus quejas, y algunos, como Begay, han criticado las declaraciones de Cameron en entrevistas anteriores.

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Uno de los factores de esta reacción negativa se debe a que Cameron supuestamente se apropió de la cultura indígena al utilizar varios relatos de su historia para las dos películas de ‘Avatar’, y al contar con un reparto totalmente blanco para representar a los personajes Na’vi, que se basan en la vida del pueblo Lakota.

A pesar de los miembros blancos del reparto, hay algunas estrellas de minorías en la película, como Zoe Saldaña y Cliff Curtis.

‘El Camino del Agua’ profundiza un poco más que su predecesora. Presenta al pueblo metkayina del arrecife en un guiño a los maoríes, en un intento de mostrar la diversidad de los pueblos indígenas de todo el mundo. Cliff Curtis, de ascendencia maorí, interpreta al jefe metkayina “Tonowari”. Pero la voz de muchos de los demás personajes sigue estando en manos de actores blancos.

Las películas también han sido acusadas de apropiación cultural por la forma en que reúnen elementos dispares de las culturas indígenas en su representación de los Na’vi de ficción. Aunque ‘El Camino del Agua’ se inspira en los maoríes, la presidenta y directora ejecutiva de IllumiNative (organización de justicia racial y social dirigida por mujeres indígenas), Crystal Echo-Hawk, opina:

“Se basa en la idea que tiene James Cameron de lo que él cree que es la historia indígena, de lo que él cree que es la cultura indígena. Todo el mundo piensa que somos un monolito. Lo que hace es aplanar lo que son los pueblos indígenas, lo que son las culturas, la lengua y las prácticas indígenas”.

“Es arrogancia, una vez más, que un cineasta blanco pueda de alguna manera contar una historia basada en los pueblos indígenas mejor de lo que jamás podrían hacerlo los pueblos indígenas”, añadió.

Vía CNN.