Algunos actores realmente odian el papel que interpretaron o la película en la que aparecieron, ya sea por su trabajo en pantalla, la historia, el elenco o las consecuencias por estar en la historia. Aún cuando las películas fueron uno de los factores que los lanzaron al estrellato de la pantalla grandre y hasta en íconos de la cultura pop, muchos artistas tienen un pésimo recuerdo de la actuación que los hizo célebres.
Megan Fox
“Michael Bay es Hitler en el set de filmación, es una pesadilla trabajar con él.” Fueron las palabras de la actriz Megan Fox a la revista británica Wonderland. Consecuencia: se perdió de interpretar a Mikaela Banes en la tercera entrega de la saga Transformers. Bay tampoco le tenía demasiado cariño a Fox. “Estaba en otro mundo, siempre con su Blackberry, hay que mantenerse concentrado”, diría a la prensa, “y después del comentario sobre Hitler, Steven Spielberg ordenó que la despidiéramos”. Las duras críticas a su actuación tampoco ayudaron a que Fox se llevara el mejor recuerdo de su paso por el set. Además de que Megan sentía que no podía lucir sus dotes de actriz en esta película y que sólo la emplearon por su físico.
Kate Winslet
Kate no se ha cansado de despedazar su propia interpretación de Rose Dawson en Titanic, una de las películas más exitosas de la historia del cine. Su propio acento le resulta falso y forzado, y se arrepiente, básicamente, de cada fotograma de la película. Por suerte, a Winslet no la marcó Titanic. Tenía una carrera antes, con títulos importantes como Sensatez y Sentimiento, y Hamlet, y éxitos posteriores como la turbulenta Eterno resplandor de una mente sin recuerdos.
Carrie Fisher
No fue nada fácil la experiencia que tuvo la Princesa Leia en el set del director George Lucas. Odiaba la película, odiaba al personaje, odiaba cada línea de diálogo que Lucas había escrito para ella. Fue una etapa imposible para Fisher. Pese a sus esfuerzos, nunca dejó de ser la Princesa Leia, aunque sus problemas de alcoholismo y adicción a los somníferos acabaron por reconvertirla en una maestra de la autoparodia, de lo que publicó libros al respecto.
Thomas F. Wilson
Cómo olvidar a Biff Tannen, el villano de la película más importante de la cultura pop: Volver al futuro. Pues nadie ha logrado olvidarlo, al punto que el actor que lo interpretó, Tom Wilson, en su carrera como comediante de stand up incluyó una canción que parodia las convenciones de fanáticos y las preguntas insólitas que le hacen con respecto a su pasado. Inclusive llegó a hacerse imprimir tarjetas con las respuestas a las preguntas más frecuentes que le hacían, para evitarse las repeticiones.
Natalie Portman
Para empezar, Thor: The Dark World tuvo problemas con sus directores. Primero renunció al proyecto Kenneth Branagh, director de la primera película; después fue contratada la directora Patty Jenkins, pero ésta también abandonó la película con el ya acostumbrado argumento de las “diferencias creativas” con los ejecutivos de Marvel. La partida de Jenkins realmente molestó a Natalie Portman, quien interpretó a Jane Foster en la película. La actriz incluso amenazó con no formar parte de la película a causa de esto, pero tuvo que hacerlo por obligación de contrato.
Jake Lloyd
La vida de Lloyd cambió a los 8 años cuando fue elegido para interpretar a un joven Anakin Skywalker en la precuela de Star Wars. Años después declaró en entrevista que pensaba que la cinta no había satisfecho a los fans, y como muchos de ellos eran sus compañeros de clases, lo criticaron e incluso fueron muy groseros con él. Las cosas se pusieron tensas en su escuela y lo molestaban todos los días, obligándolo a renunciar a la actuación. Incluso confesó sentirse un poco traumado, y que todo lo relacionado con la película le causa mucho estrés. Dice que su infancia fue un infierno.
