Una de las cosas más dolorosas de la vida es terminar con una relación, sin importar si fue corta o larga. En cuanto una relación amorosa se termina, empieza el proceso de superación, en el cual recurrimos a nuestros amigos para ahogarnos en alcohol, salimos de viaje “para olvidar” o comenzamos con un nuevo proyecto como señal de que “podemos salir adelante”. Y es que el problema no es el “cómo salir adelante”. El problema es “cuándo” se acabará el sufrimiento.

Bien, la ciencia tiene una respuesta que te puede guiar en este horrible escenario. Según un estudio publicado en el Personality and Social Psychology Bulletin, la rapidez con la que una persona superará una ruptura amorosa dependerá únicamente de su propia personalidad.

Suena muy subjetivo, ¿no? Pues lo es, pero lo que este estudio explica es que cuando una persona nos rechaza, lo vemos como un reflejo de nuestra personalidad y de manera consciente o inconsciente definimos cómo y cuándo saldremos de este hoyo al que acabamos de caer. Es muy simple, si eres una persona proactiva, sin darte cuenta vas a estar del otro lado muy pronto.

Si eres una persona apasionada, tal vez va a pasar mucho tiempo hasta que estés recuperado, y así sucesivamente. Y viéndolo así, tiene mucho sentido.

Es decir, no debería existir un período de tiempo definitivo para superar una relación perdida. Siempre va a depender de la relación y de las personas involucradas.

Vía NYMag.