¿Cuántas veces al día entras a Facebook? Es más, ¿cuántas veces por hora levantas tu celular para revisar tu cuenta o para publicar algo? No nos digas, seguramente son tantas veces que parecerá que tienes un problema de adicción con esta red social. Pero, ¿qué crees? Tu obsesión por estar todo el día pegado a Facebook no es algo tan malo, al final de cuentas; te decimos por qué.
Amber Ferris es una profesora asistente en la Universidad de Akron, y ella realizó un estudio precisamente sobre la obsesión de las personas con esta red social y encontró que “la manera en la que utilizas Facebook determina tu dependencia con esta plataforma”.
Siendo más precisos, este estudio encontró que las personas que están en Facebook solo para hacer nuevos amigos resultan ser personas positivamente extrovertidas y altamente sociables en el “mundo real”.
Esto por un lado, y por otro, las personas que se la pasan “posteando” cosas -principalmente- positivas, resultan ser personas muy honestas, exitosas y felices en la vida. Es decir, una persona feliz tiende a compartir su felicidad en Facebook con mayor frecuencia.
Y así es como la ciencia nos dice que ser adictos a Facebook no necesariamente es algo malo.
Vía Brit.co.
