Ir a un concierto solo, no es tan malo como te imaginas, al contrario, puede ser tu mejor experiencia. Si no lo crees, debes leer los beneficios que tiene. Al principio puede ser raro ir a un concierto solo, más si estás acostumbrado a estar acompañado en todos los lugares a los que vas. No te preocupes, no estarás solo, la música te acompañará.
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Beneficios de ir a un concierto solo
1. Puedes moverte hacia donde quieras. No tendrás que cuidar a nadie para que no sea aplastado, si quieres acercarte hasta el escenario lo harás fácilmente solo y, si deseas quedarte a lo lejos, igual lo podrás hacer. No hay nadie con quien quedar bien.
2. Nadie te verá en tu momento fanático. Podrás bailar, cantar y parecer un loco fanático sin que nadie te juzgue. ¿Ya te estás animando?
3. Te vuelves más observador. Ya que no hay nadie que esté ahí para distraerte, observarás hasta los más mínimos detalles y apreciarás mucho más el concierto. Tendrás una conexión directa con el show en vivo.
4. Conocerás gente como tú. Es decir, con los mismos gustos musicales. Claramente tendrán muchas cosas de las cuales hablar. Aunque vayas a un concierto solo, terminarás con más amigos que si hubieras ido con alguien más.
5. No te importará si a alguien no le gusta la música. A veces tu eres más fanático del grupo al que van a ver y te estresas por que le guste a tu acompañante. Esto dejará de ser una preocupación, cuando vayas a un concierto solo.
6. Jamás te preocuparás si tu amigo se pierde. Estás solo, así que no puedes perderte de nadie, porque a veces es tanta gente que empieza a separar a los grupitos de amigos y luego hasta terminan peleándose.
7. Tu decides la hora de llegada y salida. Si quieres llegar mucho antes para ver al grupo que abre el concierto, puedes hacerlo. Igual, si te aburres o quieres permanecer más tiempo, tú decides la hora en la que te vas.
8. En resumen, tendrás el control de todo. Las decisiones dependerán de ti. Nadie te dirá hacia donde ir, qué hacer, qué no hacer. La pasarás realmente bien yendo solo.
