Hace ya varios años, Eminem salió al mundo de la música para sorprender a todos y ganar una fama impresionante. Gracias a sus letras, su actitud y su estilo, se volvió uno de los raperos más importantes de la década pasada y por siempre sera recordado como el “verdadero Slim Shady”. Si bien ahora está desaparecido y sus muchas polémicas le han ganado el desagrado de muchos, por siempre tendrá un lugar especial en nuestra adolescencia. Aquí está el por qué:

Canciones de Arctic Monkeys perfectas para cada momento de tu vida

Estas son las razones por las que Eminem fue el ídolo de nuestra adolescencia:

1. Porque fue uno de los primeros raperos blancos relevantes: y podía hacerlo tan bien como cualquiera.

2. Porque no tenía miedo a decir lo que quería: y en sus declaraciones siempre hablaba de lo que se le antojaba sin ningún tapujo.

3. Tenía un lado sensible y no le daba miedo mostrarlo: no era como otros raperos que sólo cantaban sobre ser rudos y sobrevivir en el ghetto, Eminem se atrevía a hablar de sentimientos y cosas más profundas del corazón.

4. Sus videos eran muy divertidos: 

5. Por 8 Mile: sí, Eminem tenía su propia película y no le fue nada mal.

6. Porque sus letras decían justo lo que se le pegaba la gana: “¿Criticar a Fred Durst? Va. ¿Qué tal Christina Aguilera? También. ¿Y si parezco sexista y misógino? No importa.” Así era él.

7. Por su estilo: ¿cuántos no quisimos vestirnos como él?

8. Porque hablaba de angustias adolescentes: como ser incomprendido por el mundo y odiar a sus papás. ¿Te suena?

9. Porque fue el primer acercamiento que tuvimos con el hip-hop: sí, hay mucho hip-hop que vino antes que él pero fue el primero que verdaderamente nos hizo amar el género.

10. Porque le dedicó una canción a su fan que se suicidó:

11. Porque hacía muchas referencias al mundo que conocías: rapeaba sobre la vida MTV, la cultura pop, la estupidez de la sociedad… Temas que eran cercanos a nuestro “yo” puberto.

12. Porque no te daban permiso de escucharlo: tu mamá sabía que había algo ahí que no debías estar escuchando y eso sólo te daba más ganas de hacerlo.

13. Porque tu mamá le decía M&M: “Ay mamá, ¡es Eminem!”