Texto: Daniel Patlán

Mi relación con Hot Chip es algo especial: por la danza de la realidad (como diría Alejandro Jodorowsky) conseguí boletos un día antes de su presentación en la Carpa Neumática del Hipódromo en noviembre del 2008, para ser exactos el miércoles 27. Al concierto asistí con dos mujeres (aplicando la Pancho Villa), una de ellas era mi prima y la otra mi actual novia. Dicho concierto fue crucial para que eso sucediera, es por ello que tengo mucho cariño hacia la banda creadora de éxitos como “Ready For The Floor” o “Boy From School”. Sin embargo, más allá de mis sentimientos nostálgicos, la objetividad está primero.

Su nuevo disco, One Life Stand, como era de esperarse es una producción madura y menos experimental que sus predecesoras, Hot Chip ya no mete sonidillos extraños ni juega tanto con sus sintetizadores. La pieza encargada de abrir es  “Thieves In The Night”, una increíble mezcla hecha con gran maestría del sonido de sus álbumes anteriores, es la perfecta introducción para el nuevo material de estos ingleses.

Hot Chip tiene un pacto con el dancefloor, de eso no hay duda. A cambio de hacer fiestas llenas de color y baile, el dancefloor les da la capacidad para hacer canciones netamente bailables como la antes mencionada, “I Feel Better” con su sonido electro noventero, “One Life Stand” y su coro pegajoso (“I only want to be your one life stand..”), “We have Love” cuyo sonido es muy parecido a “Ready For The Floor” y para finalizar y cerrar esta producción, “Take It In” despide a los escuchas con un ritmo fino y delicado.

Ya es costumbre en los álbumes de Hot Chip que haya dos tipos de canciones: las amigables con la pista de baile y las que están hechas para las intimidad de una alcoba. En ese bemol, los tracks “Slush”, “Alley Cats” y “Keep Quiet” logran una atmósfera cercana a canciones como “In The Privacy Of Our Love” o “Whistle For Will”, ambas de su producción anterior, Made In The Dark.

Otro tema a resaltar es el hecho de que un gran número de canciones de One Life Stand están basadas o tienen como núcleo el amor, tema que fascina a Hot Chip y que está en constante tratamiento por parte de esta banda que esperamos regrese pronto a la ciudad de México.

Mejor canción: “Thieves In The Night”

Cual canción de rock progresivo, poco a poco van entrando las diferentes partes de la canción, logrando pasar los seis minutos de duración sin que aburra; incluso se dieron el lujo de tener un solo de guitarra en una canción netamente fiestera.