No todos maduramos al mismo paso y para bien o para mal, muchas veces las personas que maduran con mayor velocidad se despegan de sus amigos en muchos sentidos. Y si bien ser maduro puede traer muy buenas consecuencias a nuestra vida diaria, a veces también puede complicar nuestra dinámica social. ¿Les ha pasado? Aquí les dejamos algunos de los problemas que tienes cuando eres el más maduro de tus amigos.

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Cada vez tienes menos temas de conversación con tus amigos.

Hay metas que te gustaría compartir con ellos, pero están lejos de pensar en cosas así.

Te mueres de ganas de salir con tus amigos, pero sus planes ya te dan algo de flojera.

Todos te buscan para que les des consejos… aunque muchas veces note hagan caso.

Y cuando tú necesitas un consejo, no saben cómo ayudarte con tus problemas.

La gente de otros círculos sociales en los que convives no entiende por qué tienes esos amigos.

Cuando hay problemas siempre eres el responsable y el que tiene que sacar a todos adelante.

Le das muchas lecciones de vida a tus amigos aunque a veces no las quieran escuchar.