Una de las preguntas que universalmente ha atormentado a la especie humana durante generaciones es aquella que se cuestiona el origen de la existencia. Hasta el momento, la teoría que mejor puede explicar cuál fue el inicio de todas las cosas es la del Big Bang (tiempo, espacio, materia); pero por supuesto, las investigaciones e hipótesis en torno a nuestra existencia continúan aflorando con el paso del tiempo; y el desarrollo de la tecnología.

Recientemente, las dudas existenciales volvieron a ser las protagonistas de una investigación científica que arrojó datos emocionantes y terroríficos por igual: Hay una posibilidad del  50.222222% que la vida sea real, y un 49.777778% de que sea generada por computadora.

Los encargados de ofrecer semejante especulación fueron los investigadores de la revista Scientific American; quienes basándose en las notas del informe “Are We Living in a Computer Simulation?” (¿Estamos viviendo en una simulación por computadora?) del filósofo Nick Bostrom, construyeron su propia teoría.

Sostengo que al menos una de las siguientes proposiciones es cierta. (1): es muy probable que la especie humana se extinga antes de alcanzar la etapa ‘posthumana’; (2): es extremadamente improbable que cualquier civilización posthumana ejecute un número significativo de simulaciones de su historia evolutiva (o variaciones de la misma); (3 ): es casi seguro que vivimos en una simulación por computadora. De ello se deduce que la creencia de que existe una probabilidad significativa de que algún día nos convirtamos en posthumanos que realicen simulaciones de ancestros es falsa, a menos que estemos viviendo actualmente en una simulación.

David Kipping, astrónomo de la universidad de Columbia, rescató las anotaciones Bostrom dándo forma a la posibilidad 50/50 de que vivamos una simulación, e incluso, se atreve a anticipar que en un futuro no podrán realizarse más “simulaciones humanas” debido a que las super-computadoras se quedarían sin recursos informáticos.

Esto se debe a que a medida que las simulaciones generan más simulaciones, los recursos informáticos disponibles para cada generación subsiguiente disminuyen hasta el punto en que la gran mayoría de las realidades serán aquellas que no tienen la capacidad de cálculo necesaria para simular realidades descendientes, las cueles son capaces de albergar seres conscientes.