40. Los Macuanos – “El Camotero”

Por: @folkmetender

El miedo hecho canción. El working class antihero, en palabras de los propios Macuanos. Tomaron un sonido arquetípico del mexicano (la pipa del camotero) y lo convirtieron en un statement político que habla sobre cómo personajes aparentemente inofensivos, pueden causarnos daño. La línea folclórica sigue presente, pero en menor proporción, y en lugar de eso, tenemos un acercamiento al new wave ochentero.

39. Robin Thicke con Pharrel Williams y T.I – “Blurred Lines”

Por: @ruzo

Entre la amplia oferta de éxitos que nos ofreció el verano del 2013, un artista de bajo perfil como Robin Thicke presentó uno de los más representativos y pegajosos. Acompañado de Pharrell Williams en la producción y Emily Ratajkowski en la promoción, Blurred Lines será una de las aportaciones de este año a las fiestas del futuro.

38. Alex & Daniel – “Mundo Real”

Por: @folkmetender

La primera canción del debut de dos grandes del pop chileno explica de qué va el disco. Pop perfecto de principio a fin, teclados, un beat amigable, un bajo que nos acompaña mientras bailamos y un coro que pone la cereza en el pastel. La mezcla de las voces de Gepe y Alex Anwandter es maravillosa y dota de personalidad al proyecto. Les garantizamos que esta canción los pondrá de buenas o mínimo les saca una sonrisa.

37. Ghetto Kids – “Takeshi”

Por: @ruzo

Los sonidos del barrio se encontraban estancados en un cliché que varios grupos estaban tomando como “bandera”, pero en realidad buscaban aprovechar la cultura del remix y lo kitsch para tener un reflector encima. Los Ghetto Kids aparecieron con canciones como “Takeshi” para recordarnos el valor de los sonidos que salen de colonias populares, y su potencial para ser la base de nuevas posibilidades.

36. Avicii – “Wake Me Up”

Por: @soyvelez

Avicii vivió más de un año de la fama de “Levels”. No fue lo único que hizo, pero sin duda lo más relevante. Para su álbum debut tenía el reto de superar una canción que lo llevó a ser cabeza de festivales como Lollapalooza. La solución fue de lógica primaria, pero altamente efectiva. Tomó su fórmula comprobada y la unió con otro de los ritmos en auge, el folk pop, con la brillante voz de Aloe Blacc como lazo. Lo logró, se superó.

35. Cafe Tacvba – “Aprovéchate”

Por: @leonardogoma

El track resume la maravilla indescriptible de la banda más grande de México: una composición genial de un individuo, convertida en una obra que roza la perfección gracias a la mano de un grupo de virtuosos. Dolor desvelado, trágico, una amenaza. La historia que no debería repetirse, pero que secretamente no podemos soltar, qué falta nos hacia que alguien la contara. Qué falta nos hacia Café Tacvba.

34. Matias Aguayo – “El Sucu Tucu”

Por: @rulobn

Percusiones brasileñas y ritmos cadenciosos que fueron inevitable escuchar una y otra vez en el año. “El Sucu Tucu” apareció como el sencillo más pegajoso en la carrera de Matías Aguayo, su lado más fino en una canción de casi cinco minutos que salió de Chile para sonar en muchas otras partes del mundo. Baile sin parar, así de sencillo.

33. Jay Z &y Justin Timberlake – “Holy Grail”

Por: @leonardogoma

La graduación de Justin Timberlake. Los cinco minutos que nos hacen creer todavía en que Jay Z puede hacer música y no solamente billetes. El salvavidas del Magna Carta Holy Grail. Fin.

32. Fuck Buttons – “Brainfreeze”

Por: @christianxrojas

El género noise y experimental se convirtió en música amigable para el oído gracias a canciones como “Brainfreeze”, con la cual Fuck Buttons provocan un trance sensorial, lleno de energía, pero sin despegar los pies de la tierra. En esta canción brillan las capas de sonido que se acumulan conforme pasan los minutos, al punto de llegar a un caos mágicamente ordenado.

31. Centavrus – “Por Eso”

Por: @folkmetender

Nada explica mejor el término electrónica regional mexicana como esta canción. Aquí, Centavrvs perfeccionan el género que ellos acuñaron. Tiene sabor latino, tropical, pero también un halo oscuro y misterioso. Los dos protagonistas sin duda son Denise de Hello Seahorse! y el maravilloso acordeón que nos guía por los casi cinco minutos de duración. El solo de acordeón los hará pararse de su silla a buscar con quién bailar pegadito y hasta el amanecer.