No porque crezcas significa que dejas de llorar por cosas por las que lo hacías seguido antes de los 25. Cumplirás años pero hay ciertas situaciones que te hacen llorar y jamás lo podrás evitar, hasta se podría pensar que te hacen llorar aún más que cuando estabas más joven.
The Killers te van a llenar de nostalgia con este gran cover
Cosas que te hacen llorar aún después de los 25
1. Las películas animadas. Los clásicos de tu infancia te hacen llorar hasta más que cuando eras niño. Les ves otro sentido o algo, lo que hace que explotes en llanto.
2. Que te corten. Dependiendo de la persona, si te clavaste cañón con alguien, es probable de que llores si te cortan. Así es, nunca escaparás de este dolor.
3. Canciones tristes. Esas canciones bastante sentimentales con las que te reconoces cuando te pasa una experiencia triste, te hacen llorar y lo sabes.
4. Te peleas con tus amigos. Peor si pierdes a un amigo que te importaba mucho. La desesperación entre el orgullo y el querer arreglar las cosas hace que puedas llorar si la situación lo amerita.
5. Ver llorar a quien quieres. A veces se puede pasar el llanto, si ves a alguien que te importa demasiado llorar, aunque te de pena puede ser que llores frente a él o ya cuando estés solo.
6. Noticias impactantes. Si estás muy emocional, ver alguna noticia fuerte que involucre situaciones chafas con niños, guerras, animales, etc. puede ser que derrames una que otra lágrima.
7. Finales de series. Hay series con las que te clavas bastante, si matan a alguien o el final te impacta, acéptalo, lloras y te harán llorar después de los 25.
8. Durante conciertos. Es esa banda que te fascina y, cuando menos te lo esperas, toca tu canción favorita. Si tienes unos tragos encima, definitivamente son de esas cosas que te hacen llorar.
9. Cuando fracasas. Te está yendo muy mal en el trabajo, no logras nada de lo que querías y la frustración te hace llorar. Nunca estás tan viejo como para no sufrir por esto.
10. Al recibir golpes fuertes. Esos golpes en el dedo pequeño del pie o en el codo, si fueron muy fuertes, indudablemente llorarás. Igual si te caes o recibes un golpe físico.
