Gustos culposos: Están ocultos en lo más profundo de tu ser y evitas que se descubran antes de que todos tus amigos se burlen de ti de por vida. Además, todos, absolutamente todos tenemos gustos culposos; Disfrutar de estos placeres excéntricos es lo que nos hace ser diferente a los demás. General y contradictoriamente, aquello que nos causa mayor placer también nos genera culpa. En cuanto a lo musical, hay muchos artistas que nos fascina escuchar pero que tienen ese no-se-qué que los hace impresentables y que, por ende, nos provocan un poquito de vergüenza.
Checa lo que debes hacer cuando tus amigos descubren tus gustos culposos.
Mantén la calma
¡QUE NO PANDA EL CÚNICO! Te acaban de cachar escuchando una serie de canciones románticas de Reik y Sin Bandera. Tranquilo, todos somos cursis de clóset.
Negarlo
“NO. NO. NO. A mi no me gusta escuchar banda. Bueno, sí. Pero sólo cuando estoy borracho, ehhh.” ¡Ay ajá! ¿Qué dedo nos chupamos?
Aprender a lidiar con ellos
No hay otra opción más que aceptarlo. A fin de cuentas todos somos diferentes.
