Parece que fue ayer cuando salió el póster de Spider-Man: Homecoming que hizo molestar a miles de fans del arácnido porque lo consideraron horrible y no paraban de comentar lo terrible que había bajado la calidad en las producciones de pósters por parte de Marvel y Sony.
Pero siempre hay una parte buena y a decir verdad es que más que el póster fuera extremadamente bonito u horrible, lo que en verdad importaba era que la película fuera buena y lo logró al no contar el origen del superhéroe. Por si no recuerdas el póster aquí te lo dejamos:
¿Qué dices? ¿Recuerdas la primera impresión? “Está equis, ¿no? Además todo lo hacen por computadora” Pues no. Resulta que el póster en realidad es una foto que tiene al verdadero Tom Holland con el saco de la prepa y audífonos, pero el actor nunca se dio cuenta de la foto.
Durante una entrevista con un medio de nuestro amado país, Holland explicó que mientras dormía en el set alguien le tomó una foto, que en realidad esa ‘escena’ no era parte de la película. Holland recordó que ese día estaba muy cansado, así que decidió tomar una pequeña siesta en el piso y el fotógrafo de la película capturó el momento que más tarde les serviría para hacer el póster.
Vía CBR.