Es un hecho que cada persona es totalmente diferente, lo raro es que todo el mundo trata de ser igual a los demás. Si tú eres de las personas que muchas veces siente que no encaja en algún lugar o que le gustan cosas que muy pocos entienden, tal vez sea una persona poco convencional. Algo que no tiene nada de malo, simplemente eres una persona que busca realmente lo que quiere e interesa.
Estás son las señales de que no naciste para llevar una vida convencional:
1. Con muy pocas personas te identificas: No es que seas antisocial o mala onda, simplemente la vida de las demás personas no te llama la atención y mucho menos te sorprende.
2. Buscas en las personas cosas que van más allá de lo superficial: Lo superficial no te importa en lo absoluto, sabes que lo que realmente importa de una persona está más allá de eso y varía en cada persona.
3. Decidiste estudiar una carrera que a muy pocos les interesa o es muy arriesgada: Las cosas que en verdad te apasionan no son las mejor pagadas, pero eso no te importó, prefieres tener una vida interesante/apasionada a ganar mucho dinero.
4. La música que te gusta no es para todo el mundo: Al igual que tus gustos, la música que escuchas es demasiado extraña para la gente común.
5. Las películas que te gustan aburren a los demás o no las entienden: Igual que en la música, el cine que te interesa va más allá de las películas de acción o cualquier chick flick.
6. Siempre te ha llamado la atención las cosas que nadie se atreve hacer: Siempre has sido una persona arriesgada y has hecho cosas que nadie se atreve hacer, desde pintarse el pelo en la secundaria hasta irte a viajar por el mundo sin mucho dinero.
7. Te vistes como pocas personas: Tu estilo podría llegar a ser un poco extravagante, pero la verdad no te importa. Lo usas para poder expresar mejor la forma en la que ves el mundo.
8. Tienes actividad que son difíciles de encontrar: Tal vez tienes que recorrer media ciudad ya que todo lo que te gusta no es común, por lo que sólo lo puedes encontrar en determinados lugares.
