Sin lugar a dudas, la pandemia por el Coronavirus vino a darle un giro de 180º a todo lo que conocíamos siendo el entretenimiento en vivo uno de los gremios que más ha padecido, pues debido a las medidas de sano distanciamiento promovidas en México (y en el mundo) no ha habido conciertos desde hace ocho meses.

Además de la audiencia, músicos, promotores y organizadores; existe un polémico sector de trabajadores de la industria cuyas vidas y oficios se vieron truncados por la emergencia sanitaria global: los revendedores.

Amados por unos y odiados por la mayoría, los revendedores son parte esencial del negocio de venta de ticketaje, y ahora que solo ha habido un puñado de auto-conciertos, su fuente de ingresos se ha visto descartada, y en algunos casos, hasta deudas les ha generado.

Lo último fue el Vive y de ahí ya nada. Ahorita ha habido pocos eventos, como los autoconciertos de Moderatto, El Tri e Intocable. Pero esas cosas no jalan, la gente no quiere ir. No todos tienen coche. Además para mí ir a revender a Toluca también está pesado.

Dijo el famoso “Oso de la Guerrero” en entrevista con Chilango.com

Como bien apunta el reportaje de Chilango, la sequía de eventos tal y como los conocíamos ha provocado que personajes como Marco Antonio “El Oso de la Guerrero” tengan que apoyarse económicamente en su familia, mientras que la situación mejora.

Otros revendedores del nuevo milenio, quienes utilizan a su favor las herramientas digitales de la nueva era, también han sufrido el mismo escenario que el mítico revendedor de la Guerrero. El gestor de la cuenta @VendoBoletosDF en Twitter (que actualmente tiene más de 18 mil seguidores) confesó que adquirió una deuda de $400 mil pesos luego del pobre desempeño de Vive Latino 2020.

Ahora se dedica a la venta de gel sanitizante y cubrebocas para sufragar sus gastos.

El último evento para el que tuve boletos fue el Vive Latino 2020. Fue bastante lamentable, porque tuve una pérdida que ascendió a más de $400,000 pesos.

Además, por el tema de la pandemia, de los que ya se habían vendido, muchas personas optaron por exigir su reembolso. Como mi cuenta es muy derecha y tiene muchos seguidores, se negoció y se les reembolso el 70% de lo que pagaron.

@VendoBoletosDF para Chilango.com

Definitivamente, la nueva normalidad supone un gran reto para todos los involucrados en el negocio del entretenimiento en vivo, cuyo estatus no regresará a lo conocido, por lo menos, hasta que el semáforo epidemiológico cambie a alerta verde.

Mientras tanto, tendremos que seguir adaptándonos.