Acatando las restricciones presupuestarias que aplican para toda la administración pública, el Instituto Mexicano de la Radio ha tenido que realizar severos ajustes a su barra de contenidos en la frecuencia de Amplitud Modulada re-ubicando sus programas con mayor audiencia, y en algunos casos, sacándolos por completo del aire.

“Esperemos que estas restricciones se eliminen pronto. Estamos en pláticas con la Secretaría Hacienda y la de Educación Pública para que esto suceda”, dijo Aleida Calleja, quien desde febrero pasado tomó posesión como titular del IMER.

No es un recorte todavía, es una reserva, así es el tecnicismo, que a un presupuesto ya aprobado, ya contemplado para la operación a las 18 emisoras del IMER, le ponen una reserva y no se permite utilizarlo”.

Debido a las medidas de austeridad tomadas por el actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador, Radio Ciudadana 660 AM, Radio 710 AM, XEB 1220 AM, La B grande de México, Tropicalísima 1350 AM, en la Ciudad de México; Radio Azul 1560 AM y 99.7 FM, en Lázaro Cárdenas, Michoacán; y La FQ 980 AM y 103.1 FM en Cananea, Sonora, dejarán de transmitir la mayor parte de su programación habitual.

Actualmente, el instituto no cuenta con el presupuesto suficiente para pagar  las licencias sindicales al Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Radio y la Televisión (STIRT).

A través de las denominadas ‘cartas de tránsito‘, el IMER debe pagar una cuota al STIRT por cada locutor/comentarista que pretenda realizar cualquier transmisión radiofónica y que NO pertenezca al sindicato con la finalidad de mantener el estilo y la unidad sonora de la emisora.

Cabe recordar que el presupuesto aprobado para el IMER este año fue de 159.2 millones de pesos, 10.5% menos que en el 2018, año en que se le asignaron 177.9 millones. A esa disminución se suman las restricciones instrumentadas por Hacienda, motivadas por el memorándum de austeridad.

Estas medidas terminan por afectar a los radioescuchas que viven en estados como Michoacán, Oaxaca o Coahuila quienes se quedarán sin acceso a la programación del IMER ya que en su localidad no se transmite la frecuencia FM, y en muchos casos, no tienen acceso a internet.