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Te presentamos las 5 mejores peleas de Daredevil en la primera temporada transmitida por Netflix. Y si esto es lo que ya quedó atrás, no podemos esperar una hora más para ver lo que la segunda temporada tiene para sus fans, ahora con Elektra y The Punisher en el vecindario.

Vs. la mafia rusa.
ESTA, esta, esta, esta es la secuencia con la que Daredevil marcó distancia con todas las demás series y películas de acción. Por un momento pensamos que estábamos viendo The Raid, peleas de artes marciales en espacios muy cerrados, de uno contra varios. Y solo por tener poderes no creas que Daredevil se encargó de todos los mafiasos de un solo golpe y ¡PUM! inconsciente. En las caricaturas quizás, pero esta serie exige un poco más de realismo.

Vs. Stick
Uno no aprende a soltar golpes y patadas así nada más de un día para otro. Una vez que perdió a su padre, el pequeño Matt fue adoptado por el maestro Stick, quien le enseñó a dominar sus nuevas habilidades, al igual que las artes marciales. Sin embargo, la relación entre Matt y Stick siempre fue complicada, y todavía en la madurez, Murdock prefiere no tener que lidiar con su viejo maestro. De lo contrario…

Vs. Nobu
Matt Murdock tuvo su primera probada del filoso acero que porta un integrante de The Hand cuando se enfrentó a Nobu, el jefe local de la mafia japonesa que trabaja con Wilson Fisk. Fue una pelea que Daredevil apenas pudo sobrevivir ya que las armas filosas del ninja de rojo dieron con su blanco en numerosas ocasiones. ¿Qué pasó ahí, Matt?

Vs. Melvin Potter
Gladiator es uno de los archienemigos de Daredevil en los comics, pero en la serie de Netflix, Melvin Potter es un sastre medio bobo que tiene un don para hacer trajes y armas especiales. De cualquier forma, Potter y Daredevil intercambiaron puños en esta pelea que deja bien claro que el sastre podría ser una amenaza si adopta la persona de Gladiator… o igual podría ser un importante aliado.

Vs. Wilson Fisk
Ah, el encuentro final contra Wilson Fisk. La interpretación de Vincent D’Onofrio como el Kingpin de Nueva York (que a decir verdad, nunca fue llamado así en la serie) fue algo exquisito. El actor supo retratar a un hombre que tiene una presencia imponente, pero a la vez, se trata de un hombre que apenas puede contener los demonios que habitan en su interior. En esta batalla en el que Daredevil y Kingpin por fin pelean mano-a-mano resulta evidente que Hell’s Kitchen es demasiado pequeño para ambos.