Desde hace mucho tiempo que Burger King y KFC han decidido apostarle a propuestas divertidas que se adapten a su público joven que día con día es más difícil.
Mientras KFC liberó aleatoriamente una consola de videojuegos que freía pollo mientras la usabas, Burger King ahora a decidido presentar su propio “joystick” con motivo del “Día del gamer”.
Basado en un formato tradicional para clásicos del arcade, el controlador luce como los pads ochenteros en los que la marca de vez en vez se anunciaba en las salas de juego tradicionales.
¿Y cómo funciona? ¡Sencillo! Conecta el Makey-Makey a una Whooper y unas papas fritas, para conseguir adaptarse a cualquier tipo de consola y sí, poder disfrutar de tus videojuegos favoritos con este peculiar controlador.
¿Dónde comprarlo? Oops! No podrás, porque irónicamente sólo es un concepto. Pero qué divertido sería, ¿no?