Las celebraciones y fiestas navideñas están prácticamente a la vuelta de la esquina, y con ellas, llega una nueva tanda de intercambios y regalos navideños que a decir verdad, no siempre son de nuestro agrado.

Así es como suceden las cosas: Tu mamá te compra un regalo que para nada es lo que querías, es más, ni te gusta ni piensas ponértelo, pero en el momento finges que es lo máximo para no herir sus sentimientos. Eso fue justamente lo que le pasó a Kenny, un dulce perrito labrador que recibió el peor regalo del mundo.

Resulta que Kenny recibió por accidente una cama que resultó ser un tanto pequeña para él (por no decir MUY pequeña) pero él hizo todo lo posible para parecer agradecido al posar con su “increíble” nuevo regalo para una serie de fotografías claramente incómodas.

Naturalmente, Kenny recibió una segunda cama, que por supuesto se adapta a sus necesidades, pero sobre todo, a su tamaño. Al final del día este perrito nos recordó que no importa lo desagradable que te pueda parecer tu nuevo regalo, pues la intención de las personas que te quieren es lo que cuenta.

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