Levantarse temprano es algo que no a todos nos late, todos preferiríamos nunca tener responsabilidades a las cuales ir y mejor quedarnos acostados todo el día, pero seguro nos aburriríamos. Si te cuesta demasiado trabajo pararte de tu cama por las mañanas, checa estos rituales perfectos, para que poco a poco te cueste menos y lo conviertas en un hábito.
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Rituales perfectos para los que sufren al levantarse temprano
1. Escucha tu canción favorita. Seguro tienes una canción que no has podido dejar de escuchar. Lo primero que deberás hacer después de levantarte, literal antes de bañarte o lo que comúnmente hagas, será poner a todo volumen esa canción. Te animarás y la mañana mejorará.
2. Prepara tu ropa un día antes. Aunque te de flojera, pero esto hará que el levantarse temprano no sea tan pesado. Justo cuando suene tu alarma y abras los ojos, sentirás calma al saber que ya no tienes que ir a sacar ropa como loco de tu clóset.
3. Coloca tu despertador/celular lejos de ti. Nunca lo tengas cerca, ya que eso hará que te sigas de corrido durmiendo. Al colocarlo lejos de ti, tendrás que levantarte de tu cama para apagarlo y ya no tendrás de otra más que comenzar con tus actividades matutinas.
4. Comienza con un desayuno que te encante. Igual prepáralo la noche anterior. Te sentirás motivado al saber que vas a comer cosas que te gustan. Una tontería si así lo piensas, pero ya no te amargarás la vida por las mañanas.
5. Haz un poco de ejercicio. Levantarse temprano puede ser más interesante si le agregas unos minutos de abdominales, lagartijas o lo que quieras. Te despertará más y a largo plazo te sentirás mejor con tu cuerpo.
6. Aléjate de la tecnología antes y después de dormir. Porque siempre te quita el sueño y, en lugar de que te enfoques en ti (en cómo te vas a vestir o qué vas a hacer), te obsesionas con la vida de los demás y pierdes tiempo.
7. Cambia la canción de tu alarma seguido. Esto hará que no odies la melodía que suena cuando abres los ojos. Porque seguro te pasa que cuando escuchas esa canción o ese sonido que hace tu alarma, no puedes evitar sentir un poco de odio.
8. No te des minutos de más. Solo te engañas, mejor levántate y, aunque vayas lento, tómate tu tiempo mientras te bañas, te vistes y comes. Mucho mejor que andar a las carreras.