Fue durante el pasado sábado 20 de julio que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sostuvo una interesante y respetuosa charla con Stefan Löfven, primer ministro de Suecia, y con quien intentó interceder ante el actual proceso legal que A$AP Rocky (cuyo nombre verdadero es Rakim Mayers) y dos miembros de su staff enfrentan en el país europeo.

Ante la presión de figuras como Kim Kardashian o Kanye West, el mandatario intentó persuadir a Löfven para poder traer a A$AP de vuelta a la nación de las barras y las estrellas, pero al parecer, esto no sucederá tal y como lo pensó.

En la llamada telefónica que duró alrededor de 20 minutos, el político sueco aseguró que no pasará por alto los procedimientos legales suecos para permitir que A $AP Rocky regrese a los Estados Unidos.

En Suecia todos son iguales ante la ley y el gobierno no puede ni intentará influir en los procedimientos legales”, aseguró el secretario de prensa de Löfven al New York Times.

Por su parte, Donald Trump agradeció vía redes sociales la “buena llamada” que tuvo con el mandatario sueco, y aseguró darle seguimiento al tema.