Para su edición de mayo de 2013, la revista Time lanzó una controversial portada, firmada por Joel Stein, en la que se lee: “The Me Me Me Generation: Millenials are lazy, entitled narcissists who still live with their parents”. Aunque es un cliché que una generación anterior acuse a otra más joven de egoísmo y apatía, Stein solamente se equivocó en el foco de su postura. Las generaciones más jóvenes no son narcisistas, son las generaciones que no conocieron límites para expresarse, son protagonistas, no solo consumidores. Sus ídolos también son muy distintos a lo acostumbrado, personas que antes hubieran pasado desapercibidas ante el mundo, hoy son las más importantes. Tal es el caso de Claire Boucher, mejor conocida como Grimes.

Aunque Grimes tiene una trayectoria mucho más larga de la que normalmente se le reconoce, su ascenso a la fama ha sido veloz. Con sus primeras producciones, Claire logró convertirse en una de las destacadas de las nuevas divas del underground internacional. Cuando el futuro vivía en manos de sitios como Altered Zones, Grimes y d’Eon se consolidaron como los más grandes de una escena minúscula. Tan pequeña, que la primera vez que vinieron juntos a México, a una fiesta de Uforia 666, pasaron casi desapercibidos ante los medios, eran un suceso de culto.

Con Visions llegó el cobijo del legendario sello 4AD y la atención de otra categoría de medios, el extraño universo de Grimes llegó para quedarse. El disco terminó en las listas más importantes de lo mejor del año y su acto en vivo uno de los más cotizados por los festivales de primer nivel. Y aunque la calidad de su música es innegable, no es la única razón para que se haya convertido en el fenómeno que es hoy.

Si bien Grimes, es uno de los íconos para las nuevas generaciones, no es el único. Lana del Rey, es un ejemplo de cómo una fórmula diametralmente opuesta también logró conectar con este público. Como Camaleón, Lizzy Grant se coló como un talento nacido en YouTube, una chica hermosa que sollozaba por un hombre que prefería a sus videojuegos sobre ella. Después descubrimos que era parte de una estrategia, magistralmente ejecutada, por un sello trasnacional, que tenía labios llenos de colágeno y viviría en silencio, porque en realidad, no tenía mucho que decir.

El éxito de Grimes se debe a que es una de las artistas, sin importar el género, que ha entendido que al quitar los filtros entre ella y sus fans, genera una conexión única. A través de su tumblr, ha logrado que fans, medios e industria la respeten mucho más como individuo. Sin avisar aparecen textos crudos y conmovedores sobre el valor de la integridad en un mundo de apariencias, reflexiones sobre apropiación cultural, palabras valiosas que no verían la luz de otra forma, respuestas a preguntas que tal vez nadie se tomaría la molestía de hacer. ¿Por qué? Porque junto a todo lo que Grimes tiene que decir hay fotos de sus Pokémon favoritos, fotos incómodas de su adolescencia y más vistazos a todo eso que la hace ver como una chica cualquiera.

La era de los ídolos inalcanzables terminó, hoy la línea entre público artista es cada vez más fina, la moneda de cambio más importante es la autenticidad. Mientras Lana es la reina de H&M y la maquila masiva para los suburbios, Claire Boucher conquistó al Olimpo de la moda, formando parte de campañas de Saint Laurent Paris e incluso llevando sus diseños a la exclusiva marca. La misma analogía funciona para sus fans.

Mientras la industria no la orille a eliminar su voz, su autenticidad la mantendrá en lo más alto, como artista, modelo a seguir y todo lo demás que pueda ocurrir en su caótico universo.

Grimes regresa a la Ciudad de México como parte del cartel del festival Corona Capital 2013.