Durante los cuatro años entre el disco debut de Little Boots y el 2013, Victoria Hesketh ha sabido cómo adentrarse un poco más en un mundo que vive de la mezcla del baile y la oscuridad. Nocturnes, el título de su nueva producción, le hace justicia al sonido que la intérprete y empresaria nos presenta esta vez, pues a pesar de que en algunos cortes se dispara su gusto por el pop universal, no deja de lado las bases y los sintetizadores misteriosos que le escuchamos desde que apareció Hands en el 2009.
Pero no todo es el recuerdo vago de “Stuck on Repeat”, pues de la mano de Tim Goldsworthy, James Ford de Simian Mobile Disco y Andy Butler de Hercules & Love Affair, este nuevo LP resulta en un tracklist de diez canciones electro pop que intentan jugar con diferentes elementos rítmicos y sonoros, sobre una base electrónica muy marcada que aunque no dista de lo que le hemos escuchado a Victoria, nos mantiene moviendo la cabeza y los pies.
El inicio del disco es fuerte. Con “Motorway”, Little Boots nos invita a bailar con ella a través de la frase “just you and me” y una canción pegajosa que nos introduce a una especie de eufórico club nocturno donde probablemente pasarán muchas cosas. Canciones como “Confusion” y “Shake”, marcan momentos en los que es notable la convivencia de ritmos electrónicos y escenarios misteriosos que se adornan con sonidos obscuros.
Lo interesante es que Nocturnes también tiene su lado pop, sobre todo en “Beat Beat”, una canción que además de tener sonidos y melodías sumamente pegajosas, se acompaña de frases tan comerciales y vendibles como: “Keep on dancing, dancing to the beat of your heart”. “Broken Record”, de la que ya pudimos ver un video, es algo similar, pues con versos rítmicos, coros eufóricos y una base que en lo personal me recuerda a Rusko, es uno de los cortes que sin duda tiene más potencial.
Lamentablemente, la intención de Victoria por mostrarse instrospectiva hace que el final del disco se sienta un poco débil, más cuando se compara con la forma en que comenzó. “Strangers” y las últimas canciones “All For You” y “Satellite”, son la forma en que Little Boots trata de cerrar más seria y menos eufórica. Esto hace que la fluidez y el ritmo del disco completo se torne un tanto lento. Al final, la fuerza con la que comenzó, se pierde en canciones que aunque son buenas, debieron de aparecer en otro momento del álbum.
