Tras algunos meses de rumores, especulaciones y el deseo de mucha gente por ver grandes nombres en el cartel, finalmente se llevó a cabo el Festival Corona Capital 2012. Fueron dos días de mucha música, mucha gente y miles de anécdotas por contar que seguramente vivirán una eternidad.

La preparación psicológica y física de la gente, medios, invitados y demás asistentes, se sintió desde el viernes cuando en la red comenzaron a aparecer fotografias del montaje y los diferentes escenarios instalados en la curva cuatro del Autódromo Hermanos Rodríguez. Todo estaba listo para recibir a miles de personas emocionadas y con sus agendas organizadas para no perderse a sus favoritos.

Las puertas del Autódromo Hermanos Rodríguez se abrieron el sábado poco antes de las 11 de la mañana, momento en el que áreas de comida, escenarios, baños y demás secciones del festival comenzaron operaciones y recibieron a aquellos tempraneros. El clima pintaba muy bien y junto con el primer acto del día por parte de María y José en el Escenario Bizco Club, esa nube oscura que amenazó durante algunas horas previas, se esfumó para dar paso a una tarde calurosa e ideal para un festival como éste.

Actos como los de Los Rayobacks, The Plastics Revolution, Technicolor Fabrics, Bufi y Freelance Whales, fueron parte del gran inicio del festival. Vicente Gayo y sus imágenes de “Yo Soy 132”, momentos como la presentación de Mutemath, la primera banda internacional del Escenario Corona Light, Unknown Mortal Orchestra, Zulu Winter y por supuesto las esperadas Dum Dum Girls, marcaron ese bloque de presentaciones donde la cantidad de gente crecía cada vez más rápido.

Quienes estuvieron en el Escenario Bizco Club minutos después de las tres de la tarde no nos dejarán mentir, la presentación de Die Antwoord fue, hasta ese momento, lo más intenso y energético del día, pues estos sudafricanos lograron hacer temblar el piso y llenar la carpa por primera vez en el día. Para ese momento, la curva cuatro del autódromo y todos sus escenarios ya estaban repletos, algunos en The Wookies, otros en The Walkmen, de ahí a Wallflowers y León Larregui. Death in Vegas en la carpa y Iron and Wine en el Escenario Corona Light, todo un festín de música donde muchos disfrutaron el atardecer con Cat Power y otros tomando una siesta en la zonas verdes.

Llegó el momento de guardar los lentes obscuros y sacar las chamarras ligeras. La oscuridad, aprovechada por Major Lazer para dar una presentación llena de luz, baile y brincos, abrazó también a actos emotivos como el de The Kills, Suede y Franz Ferdinand. Más de 50 mil personas repartidas en cuatro escenarios, emocionados por el tremendo show de The Hives y el español de Pelle Almqvist, así como la fiesta organizada por Miike Snow. Al final, para muchos el cierre de Basement Jaxx no fue lo esperado, para otros, el momento más deseado y feliz después de 12 horas de sobrevivir al calor, al frío y a las mareas de gente. Miles de personas que de madrugada, ya pensaban en el siguiente día.

Para muchos, el domingo es el día de la semana donde se descansa y se relaja después de una semana de trabajo y un sábado de fiesta, pero este fin de semana, el Festival Corona Capital fue el culpable de que muchos utilizaran sus energías para sobrevivir a otra jornada de música en vivo, caminatas y un calor mayor al primer día.

Bam Bam y Josef Bamba, mexicano y noruego respectivamente, fueron los encargados de dar inicio a las actividades del domingo, las cuales comenzaron a las 12 del día con más, mucha más gente que el día anterior, caminando de escenario a escenario, visitando stands de medios, probando algunas de las opciones de las zonas de comida y en momentos, descansando bajo las sombras de los árboles y zonas techadas.

Muchos fans disfrutaron de Tribes, otros descubrieron y se sorprendieron con el proyecto mexicano I Can Chase Dragons! y algunos pocos más, tomaron la primera cerveza del día mientras los beats de Rebolledo vibraban en el Escenario Bizco Club. Con leggins rojos y lentes oscuros, Francisca Valenzuela también logró hacer cantar a todos en el Escenario Capital y prepararlos para la llegada de Alabama Shakes, uno de los actos más esperados del día y que no decepcionó a nadie, pues Brittany Howard y compañía lograron lo que hasta ese momento, nadie había hecho en ese escenario, que fue llenarlo por completo.