Cuenta la leyenda que ni siquiera Bob Kane, Bill Finger y Jerry Robinson, creadores de ‘Joker‘ en los cómics de Batman, entienden a ciencia cierta cómo fue que llegaron a crear a un súper villano tan maquiavélico, malvado e inevitable sin siquiera añadirle cualquier tipo de “super poderes“.

Sin embargo, lo que es una realidad es que los tres han compartido en múltiples ocasiones que si existiera algo así como un “origen” ó punto de partida, ese sería ‘The Man Who Laughs‘, obra literaria publicada en 1869 por el escritor francés Victor Hugo, que más delante fuera llevada a la pantalla grande por primera vez en 1909 gracias a la Pathé Film Company, y popularizada para convertirse en un filme de culto norteamericano en 1928 por el director Paul Leni.

Y esto no es ninguna suposición. Medios como CBR que son extremadamente cercanos a DC, su fandom y muchas de las aristas que desarrollan a estos grandes personajes y tangentes tanto en el universo de sus cómics, como en las adaptaciones al cine, han unido diferentes conversaciones con los creadores y la obra de Victor Hugo para asegurar que de hecho, Joker es una versión moderna de ‘The Man Who Laughs’.

¿Y cuál es esa conexión? Ambos personajes han sido rechazados por la sociedad; alejados, humillados y llevados a un punto de abuso tan extremo que únicamente la locura funge como un refugio tanto para Gwynplaine como para Joker.

¿La única diferencia? Joker es un villano, Gwynplaine una víctima. Uno disfruta del mal y el sufrimiento tanto propio como ajeno, mientras que otro sufre y dentro de su locura, busca una inexplicable obsesión por pertenecer y ser “normal”.

Interesante, ¿no? Chequen por acá el trailer de la película original. Pese a que muchos piensen que la influencia de Victor Hugo únicamente recae en los cómics, incluso directores como Tim Burton mantuvieron la influencia expresionista de Paul Leni en su versión original.