No tanto eliminada, pero si rebajada (pero en el sentido de una bebida mal servida, no tan fino y disfrutable como en el de una cumbia, por ejemplo).

Y aunque todos creamos que la presencia de Disney dentro de la franquicia de Star Wars es la culpable de que tengamos estas películas más “de niños” y no tanto para los verdaderos/viejos fans, la realidad es que el aspecto comercial corrompió a Lucas desde tiempos memorables y todo lo que hace, lo hace para que las películas tengan una mejor recepción a nivel “entradas”.

Por eso es que todo el desarrollo de la “Order 66”, no mostró sangre ni cuerpos de Jedis tirados en el suelo, así como jóvenes padawans masacrados a manos del futuro Darth Vader.

Ian McDiarmid, actor que interpretó a Palpatine, relató en una entrevista que originalmente en el set, varios actores interpretaron estas duras escenas con “jarabe color sangre” para representar la cruel y devastadora realidad del entonces “chasquido” que hoy se asemeja al de Thanos.

Sin embargo, para manterlo todo más PG-13, George decidió simplemente utilizar escenas que “dieran a entender lo que sucedía” sin sangre, sin tanta “violencia” y de nuevo, con aspectos mucho más “rebajados”.

Mal George, muy mal…