Todos deseábamos que nuestras clases fuesen como en El Autobús Mágico, en lugar de leer muchos capítulos sobre Biología o escuchar al Profesor hablando y hablando como si de niños comprendiéramos todo lo que nos decían, hubiéramos podido vivir todo lo que nos relataban en las clases. El Autobús Mágico era increíble y te decimos por qué.
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Razones por las que El Autobús Mágico fue lo mejor para ti
1. Vivías las clases. Siempre, el salón de clases no tenía función alguna. Si la clase trataba sobre la prehistoria ibas con los dinosaurios, si era sobre el cuerpo, entrabas en uno. Seguramente así se te quedaban grabadas las clases.
2. Está basada en un libro. Lo que significa que estuvo muy bien planeada y acoplada a la televisión. Siéntete ñoño, pero fuiste educado con este programa de televisión.
3. Maneja los estereotipos de los compañeros. Ya que en El Autobús Mágico está el súper estudioso, la niña nueva, el deportista y más, tal cual y cómo ocurre en las escuelas reales.
4. Te aterrizaban a la realidad. Al final, se recibían llamadas de niños quienes preguntaban qué no era posible como cuando se hacen pequeños, o qué sí como el trabajo de las moléculas en algún capítulo.
5. Había capítulos de cosas que te dan asco. Como el final de la digestión, lo que pasa cuando las cosas se pudren, etc.
6. Podías volverte diminuto. En El Autobús Mágico todo era posible, por lo que si querías hacerte pequeño para entrar al cuerpo de tu amigo o dentro de un pan, esto se podía ocurrir.
7. Viajaban en el tiempo. Si amas a los dinosaurios y, viste este capítulo, sabrás que conocieron a los extintos animales.
8. Podían entrar en la lava de un volcán. A bordo de El Autobús Mágico, podías entrar hasta en lava. Seguro en tu infancia soñaste con poder hacer esto sin morir en el intento.
9. ¿Quién no hubiera deseado ir al espacio? La NASA se queda corta con las habilidades del autobús de este programa, el espacio era visitado en constantes ocasiones.
10. La comida era explorada. Hasta dentro de un pastel podías estar, gracias a El Autobús Mágico. Terminabas con hambre con esos capítulos.
11. Si soñaste con transformarte en abeja, reptil u otro animal… No sólo se trataba de viajar, sino de transformarte en el objeto de estudio.
12. Hasta una nube podías ser. Aunque no lo creas, además de animales podrías volverte una nube y conocer el proceso de la lluvia. Todo gracias a El Autobús Mágico.
