Si crees que tomarse una chelita antes de ir a la cama es bueno, estás mal. Pasa todo lo contrario, en realidad estás alterando el mecanismo de sueño de tu cuerpo, el cual se llama homestasis.

También te puede interesar: “La ciencia dice que tomar alcohol es bueno para tu salud”

Investigadores de la Universidad de Medicina de Missouri han estudiado los efectos que tiene esta bebida en el sueño durante los últimos cinco años. De ello encontraron que el alcohol interfiere con el sistema del cerebro responsable de regular la necesidad de dormir en cada individuo.

“Descubrimos que el alcohol promueve el sueño al afectar la homeostasis en el cerebro “, cuenta el profesor Mahesh Thakkar.

Si una persona no duerme lo suficiente, la homeostasis  produce adenosina, una sustancia que regula al sueño y que incrementa la necesidad de dormir. Si alguien se va a dormir temprano, la homeostasis cambia y esa misma persona puede despertar a mitad de la noche o muy temprano. De modo que aunque el alcohol presione a la gente por dormir, a largo plazo, en realidad les quita el sueño.

“A partir de nuestros resultados, es claro que el alcohol no debe ser usado para dormir”, cuenta el investigador Pradeep Sahota. “El alcohol interrumpe el sueño y disminuye su calidad. Además, es diurético, e incrementa la necesidad de ir al baño, lo cual también causa que te despiertes temprano o en la mañana”.

Ahora ya saben que aunque se enfiesten mucho, es muy probable que duerman poco.

Vía Futurity