La transición de Iggy Azalea es un fenómeno poco común en la industria. A pesar de que el rap, el hip-hop y el pop se cruzan incómodamente en diversos momentos de la historia cultural de Estados Unidos, no tenemos memoria de otra artista que haya manejado tan bien los dos mundos. Estar justo en la rayita le ha traído credibilidad, alcance. Es democrática con esa dósis de coolness que necesita cualquiera para pasar al siguiente nivel.
Justo esta semana leíamos en Billboard que “Fancy” acababa de anotarse un récord histórico: 6 semanas en el número uno. Ninguna rapera ha logrado nada similar.

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Pero esta misma semana se filtró en YouTube un video bastante extraño, en la que se muestra una cara de la artista, digamos… plástica. Júzquenlo ustedes mismos a continuación:

La imagen nos deja claro que es ella, el audio sin embargo pareciera sonar a alguien más. Parece más a una versión deslavada y corriente de Britney Spears, que la súper rapera empoderada que conocemos hoy.

El mundo de la música de muchas vueltas, muy rápido. ¿No le convendría más desparecer esto? Si es que fuera suyo, no creo que ni ella quiera acordarse de sus simplonas aspiraciones poperas.

Nosotros haremos como que nunca lo vimos, y le volveremos a dar play a esto: