Los Ángeles.- El cantante Thom Yorke pasó un mal rato anoche al ser arrestado por la policía de Los Ángeles tras un reporte anónimo por parte de uno de los invitados a una exclusiva fiesta en la mansión Madison Avenue, a la que solo es posible asistir mediante la rigurosa presentación de una invitación.

De acuerdo a los asistentes, el señor Yorke pretendió ofrecer sus servicios como DJ para que se le permitiera el acceso a la gala, actividad que le fue negada debido a que Paris Hilton se encontraba en esos momentos amenizando la noche con su espectáculo de mezcla musical.

“Tuvimos que llamar a la policía porque el individuo se negó en repetidas ocasiones a retirarse, insistiéndonos en que quería que lo escucháramos tocar. Le dimos unas monedas y un croissant, pero ni así logramos que se fuera”, comentó el anfitrión William Cabrera.

Los agentes de la policía tuvieron que forcejear con el vocalista, quien a través de pataleos se sujetó a uno de los barandales de la mansión para intentar que desistieran en su intento de retirarlo de la escena.

En ciertos momentos, Yorke interpretó a capela algunos de los éxitos de Radiohead, presumiblemente con la intención de generar compasión entre los presentes para que se le permitiera disfrutar del evento.

Tras ser sometido por cuatro guardias y una señora mayor que le dio bolsazos para que se callara, Thom Yorke fue remitido al departamento de policía donde deberá emitir su declaración de los hechos, además de enfrentar cargos por suplantación de identidad, cuando, en un último intento porque lo dejaran pasar, intentó convencer al velador de que él era Macaulay Culkin.

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