“Bitter Sweet Symphony” es sin duda una de las canciones más importantes de la década de los noventa, del movimiento brit pop, y por supuesto, en la carrera de The Verve, agrupación originaria de Wigan, Reino Unido liderada por Richard Ashcroft. Hasta este punto todo parece bastante normal, pero la icónica canción lanzada en 1997 esconde un secreto bastante oscuro detrás de su composición.
Resulta que durante 22 años Ashcroft, quien compuso la canción, no recibió ni un solo peso de las regalías del tema debido a que contiene una secuencia de cinco notas de “The Last Time” de The Rolling Stones. Dicho lo anterior, la canción pasó a ser propiedad de Mick Jagger y Keith Richards quienes durante más de dos décadas recibieron las remuneraciones económicas procedentes de “Bitter Sweet Symphony”.
Ahora, tras años de argumentos legales, Jagger y Richards accedieron a regresar todos los derechos del tema a Richard Ashcroft, y por supuesto, los beneficios económicos que representa.
“Me da un enorme placer anunciar que en el último mes, Mick Jagger y Keith Richard han accedido a darme su cuota de ‘Bitter Sweet Symphony‘. Este notable cambio en los hechos fue posible por un gesto generoso y magnánimo de parte de Mick y Keith, quienes coincidieron al sentirse felices de que los créditos de la canción ahora excluyeran sus nombres y de que todas las regalías derivadas de la canción ahora pasaran a mí” puntualizó Ashcroft en un comunicado.
