She & Him el exponente folk a destacar en una larga lista de combos chica irrestible, chico indiferente. Ella: estrella de cine y televisión, empresaria, compositora, fundadora de una comunidad a favor de la mujer, exesposa de un músico atormentado e inspiración para la manicura de un sinfín de señoritas vía Pinterest. Demasiado buena para ser verdad. Él: un excéntrico ermitaño con maestría en 6 cuerdas y una discografía tan extensa como el misterio que lo rodea. En Volume 3, M. Ward y Zooey Deschanel amplían la extensión de su “retromanía”, insinúan que ofrecerán algo más, pero jamás rompen personaje.

Aunque parece monocromático, Volume 3 es un álbum en blanco y negro; solamente tiene 2 polos. En el extremo cursi y alegre brilla “Never Wanted Your Love”, una oda al amor que se vuelve adicción. También destaca “Together”, que tiene una alegría tan contagiosa que no nos sorprendería que se vuelva un clásico en secuencias de créditos de películas para toda la familia; canción de fórmula impecable.

El polo menos optimista tiene a “Snow Queen”, una auto-declaración en la que Zooey se hace notar como una mujer independiente y despiadada, que al igual que Summer Finn, de la película 500 Days of Summer, se encargará de lastimarte hasta que la dejes en paz. “London” sorprende porque el dúo cambia las cuerdas por piano para olvidar los miserables recuerdos que tienen ligados a la inclemente bruma y frialdad inglesa.

She & Him se ha caracterizado por incluir covers en cada uno de sus álbumes y para Volume 3 jugaron con la numerología y entregaron 3. El primero es “Baby”, un corte resultado de la influencia de los grupos de chicas producidos por Phil Spector y en el que la voz de Ward tiene más protagonismo. La segunda en aparecer es “Hold Me, Thrill Me, Kiss Me”, popularizada por Karen Chandler y Mel Carter, fiel en espíritu a la original. Por último, la sorpresa, una versión impecable a la versión bilingüe (inglés-francés) de “Sunday Girl”, de Blondie, en el que más que una Harry destrampada, Zooey luce elegante como Jane Birkin.

El mensaje clave del LP está en “I Could’ve Been Your Girl”, una confesión disfrazada de sollozo, típico del dúo, en el que Deschanel da a entender que su examante no solo se perdió la oportunidad de tenerla, sino que además pudo haberse adjudicado algo de responsabilidad por sus múltiples éxitos; pobre diablo. Volume 3 cierra con un reprise a esta canción que se desvanece lentamente. Zooey Deschanel vive en pretérito, desde su ropa, hasta lo que escribe, se muestra atrapada en un pasado que parece nunca terminará.

No es casualidad que este par siga llamando volúmenes a sus álbumes, She & Him es un pasatiempo para ambos, no es un desahogo creativo, ni una manera de proyectar su voz, solo una colección de sentimientos hechos canciones. Hay gente que hace lo mismo con álbumes fotográficos, pero sería muy poco para la peculiar Zooey… ¿Y Ward? Quién sabe qué esconda debajo de esas gafas oscuras.