A la medianoche de hoy, Pink Floyd compartirá su primera canción inédita desde ‘The Division Bell’ de 1994; cuando lancen su nuevo sencillo y vídeo para “Hey Hey Rise Up”, cuyos beneficios se destinarán a la ayuda humanitaria en Ucrania.

En el nuevo tema, David Gilmour y Nick Mason se unen al bajista Guy Pratt y a Nitin Sawhney en los teclados, con la voz de Andriy Khlyvnyuk de la banda ucraniana Boombox.

La canción, que se grabó la semana pasada en el granero de David Gilmour; rescata la voz de Khlyvnyuk de un post de Instagram en el que entona la canción de protesta ucraniana de la Primera Guerra Mundial, “The Red Viburnum In The Meadow”, en la plaza vacía de Sofiyskaya en Kiev. El título del corte de Pink Floyd retoma la última línea de la canción, que se traduce como “Hey Hey, levántense y regocíjense”.

“Nosotros, como tantos, hemos sentido la furia y la frustración de este acto vil de un país democrático independiente y pacífico que ha sido invadido y cuyo pueblo ha sido asesinado por una de las principales potencias del mundo”- dijo Gilmour, quien tiene una nuera y nietos ucranianos.

Continuó explicando: “En 2015, toqué un espectáculo en Koko, en Londres, en apoyo del Teatro Libre de Bielorrusia, cuyos miembros habían sido encarcelados. Pussy Riot y la banda ucraniana Boombox también estaban en el cartel. Se suponía que iban a hacer su propia actuación, pero su cantante Andriy tuvo problemas con el visado, así que el resto de la banda me apoyó en mi actuación; esa noche tocamos ‘Wish You Were Here’ para Andriy”.

“Hace poco leí que Andriy había dejado su gira americana con Boombox, había vuelto a Ucrania y se había unido a la Defensa Territorial. Entonces vi este increíble vídeo en Instagram, en el que se sitúa en una plaza de Kiev con esta hermosa iglesia de cúpula dorada y canta en el silencio de una ciudad sin tráfico ni ruido de fondo a causa de la guerra. Fue un momento poderoso que me hizo querer ponerle música”.

David Gilmour Vía Pitchfork.

Gilmour compuso la música del tema y consiguió hablar con Andriy desde su cama de hospital en Kiev, donde se recuperaba de una herida de metralla de mortero. “Le toqué un poco de la canción por teléfono y me dio su bendición. Ambos esperamos hacer algo juntos en persona en el futuro”, concluyó.