Después de que el video de una pantalla gigante cayendo de lleno sobre un bailarín diera la vuelta al mundo; se ha informado que la víctima, Mo Lee Kai-yin, de 27 años de edad; está en riesgo de quedar permanentemente paralizado del cuello hacia bajo.

Los eventos se registraron durante el cuarto concierto de doce de la boy band Mirror, que se estaban llevando a cabo en el Hong Kong Coliseum. Una fuente médica declaró al South China Morning Post que el accidente provocó que la tercera y la cuarta sección de las vértebras cervicales de Lee se dislocaran, lo que le impide mover sus extremidades y le causó lesiones en la cabeza y los pulmones. Al parecer, los médicos pudieron estabilizar su columna vertebral, aunque es necesario entubarlo y no se sabe si los nervios dañados sanarán, lo que determinará la posible parálisis.

Mo Lee Kai-yin ha sido sometido a dos operaciones, pero sigue en estado crítico, según un informe de HK01 del pasado 1º de agosto.

Mientras tanto, Mirror aún no ha emitido un comunicado oficial sobre el incidente en el que otro bailarín, Chang Tsz–fung; también fue impactado por la caída de la pantalla, aunque recibió heridas de menor gravedad que podrán ser tratadas con fisioterapia.

El director ejecutivo de la promotora de conciertos MakerVille, Lo Ting-fai, se inclinó y pidió disculpas a Lee y a su compañero Tsz-fung cuando los visitó en el hospital el pasado 29 de julio. El ejecutivo informó de que Lee estaba consciente al momento de su visita y que podía comunicarse.

Se ha informado que MakerVille se enfrentará a una investigación completa por posible incumplimiento de normas de salud y seguridad. El Secretario de Cultura, Deportes y Turismo de Hong Kong, Kevin Yeung Yun-hung; declaró a los periodistas que, aunque entendía el clamor por respuestas del público, el gobierno necesita reunir “bases fácticas y científicas” y varios ministerios compartirán sus conclusiones con el público.

Yeung declaró a los periodistas que las investigaciones preliminares habían revelado que el incidente había sido causado por un cable roto, según el South China Morning Post. Un miembro del personal del concierto dijo al medio que, a pesar de los planes para que la pantalla fuera “levantada y girada”, en los ensayos no se probaron todas las posiciones de la pantalla.