Después de un explosivo debut discográfico con Kill’ Em All, Metallica demostró una importante madurez y desarrollo musical con su segundo material de estudio, Ride The Lightning. Según han declarado en distintas ocasiones, el disco está fuertemente influenciado por la idea de la muerte. Así también, entonces, lo están sencillos como “Creeping Death”; “For Whom the Bell Tolls” y “Fade to Black”. Esta última, sin embargo, se inspiró en un desafortunado evento de la vida real que mucho tiene que ver con la pérdida.

En 1984, Metallica ofreció un frenético espectáculo en el estacionamiento de The Channel, que era considerado como la meca del heavy metal en Boston, Massachusetts. Haciéndose acompañar por los conjuntos locales Axminster y Steel Assasin; se trató de uno de los shows más legendarios jamás vistos en The Channel, lugar que cerró sus puertas en 1991.

METALLICA Streams 1990 Rehearsal Of "Don't Tread On Me" & Early Video For  "Enter Sandman"

Todo con el concierto en The Channel transcurrió sin problemas, hasta que los fanáticos se fueron a casa y Metallica se retiró a descansar. Resulta que, en la intimidad de la noche, el camión que contenía los instrumentos musicales de del conjunto fue robado. Los ladrones se llevaron unos $40 mil dólares en equipo, incluyendo la batería de Lars Ulrich y uno de los amplificadores Marshall de Kirk Hammet.

Fue este tipo de pérdida, la material; la que inspiró a James Hetfield a componer “Fade to Black”, una de las baladas más famosas de su abultado catálogo.

Sea como fuere, lo único que no se llevaron los asaltantes fueron las guitarras de Metallica pero, aún así; Hetfield quedó destrozado por el suceso. Recordó que se preguntó por qué debían de molestarse en ir (o si alguna vez llegarían) a Europa, para tocar el siguiente tramo de la gira Ride the Lightning. Pero, ¿tenía Hetfield ganas de suicidarse después de que le robaran su amplificador favorito en Boston?

“Estoy seguro de que no estaba pensando en suicidarme, pero era mi amplificador Marshall favorito”.

La situación se resolvió positivamente para Metallica, luego de que sus colegas en Anthrax les prestaran su equipo para completar el tramo europeo de la gira, que empezó en Zúrich, Suiza. Naturalmente, su carrera apenas iba empezando y, con el tiempo, pudieron reemplazar todo el equipo que les fue robado aquella frenética noche en Boston.

Muchos años después, sabiendo lo que es ser estafados de esa manera, Metallica se ofreció a pagar con su propio dinero a la banda de covers de Metallica, Blistered Earth, después de que les robaran miles de dólares en equipo. La solidaridad del gremio metalero en su máxima expresión.

Why Metallica's 1993 Jakarta concert matters for Indonesia - Academia - The  Jakarta Post