1. Die Antwoord (Corona Capital, Curva 4 del Autódromo Hermanos Rodríguez, 13 de octubre)

El festival más esperado del año, el escenario con el talento más propositivo y fueron tres parias sudafricanos quienes se llevaron el año. Abren sin pena, “DJ Hi-Tek will fuck you in the ass” y lo que sigue es un frenesí que no cesa. Ver a Die Antwoord es como si unos alienígenas acabaran de aterrizar y se pusieran a rapear. Son extraños, de mal gusto y pésimas costumbres… por momentos son más un striptease que una banda y aún así lo logran. Quizá en muchas otras partes del mundo Die Antwoord son vistos como algo curioso, pero en México lograron conectar con un público que habla lo mismo que ellos: el idioma del tercer mundo. La sensación sudafricana dio misa en la meca de la perdición. Además el excelente sonido y disposición del Bizco Club ayudaron a que aunque fuera por un set, el Corona Capital entrara en modo rave. Ahora queremos ver a Die Antwoord en solitario, cuanto antes.