Bad Bunny, el cantante más exitoso del momento, se presentará los próximos 9 y 10 de diciembre en el Estadio Azteca con su ‘World Hottest Tour‘ (que dicho sea de paso, es la gira más redituable del momento) y, en el marco de dichos eventos; ha surgido un testimonio de todas las exigencias que el puertorriqueño hace a lo organizadores antes, durante y después de un concierto.
A través del podcast en YouTube Doble G, Alex Tarín, promotor de la empresa Real Entertainment en Cd. Juárez, Chihuahua; contó la experiencia que tuvo al contratar a Bad Bunny por allá del 2018, cuando el cantante se encontraba en medio del tour ‘La Nueva Religión II‘.
Admitiendo que en aquel entonces no era el fenómeno global que es hoy, Tarín dijo que de Bad Bunny no tiene ninguna queja (ya que nunca se mostró prepotente o arrogante); sin embargo, vaya que padeció con el equipo de management del artista que le exigía diversas cosas que, de no ser atendidas, podían llevar a la cancelación del evento.
“De él no tengo nada malo que decir, pero por ejemplo, imagínate, así te lo pongo: uno paga, es el promotor, productor del evento y no te puedes tomar foto con él”.
“Ya era de que le tenías que rentar avión privado, tenía que ser un hotel cinco estrellas, habitaciones para 30 o 35 personas más staff. Los vuelos, aparte sus bailarines y la demás gente que no vienen con él en el avión privado, pues tienen que ser de primera clase”.
Vía Doble G.
Camionetas blindadas, caterings exactos (ni una botella de agua más, ni una botella menos), prohibición total de fotos y/o videos y un sin fin más de excentricidades fueron las que Real Entertainment tuvieron que sortear para lograr la presentación de Bad Bunny en Cd. Juárez, ¿qué pasará ahora en su jornada doble del Estadio Azteca?
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