Parece ser que la industria de la música no entiende que no ha entendido nada, al menos en los EE. UU.

Después de que, incluso Live Nation perdiera la batalla contra el COVID-19 y todos sus auto-conciertos quedaran completamente cancelados por la creciente alta en contagios en los EE.UU., ahora es la Asociación de Organizadores de Festivales (AIF por su siglas en inglés), la que ha propuesto un detallado plan para ofrecer un sistema de sana distancia pertinente y funcional que de oportunidad tanto a músicos como audiencia y promotores de volver a reactivar los festivales masivos.

Dentro del PDF (disponible aquí), se especifica que se trata de un draft en proceso mismo que, de momento, ya se encuentra un poco más avanzado y sensato que los borradores pasados, donde diferentes promotores del mundo proponían hacer “centros de chequeo masivos” que por pura definición, se contradicen a las normas públicas de sana distancia.

Y no vamos a decir que este suplemento es funcional, porque no lo es; lo único funcional es limitarse a los streamings y seguir procurando invitar a la gente a utilizar cubrebocas ó no salir de casa.

Pero al menos, la industria tiene un frente que está trabajando en tangentes que les permitan trabajar y de momento, esto es lo más cercano que se tiene a una propuesta.